Hórreos


POR MANUEL ANTONIO MIRANDA ÁLVAREZ

Graneros existen en todo el mundo (Noruega, Suecia, Suiza, Serbia, Bosnia, Moldavia, Cáucaso, Filipinas, Nueva Guinea, Níger, Madagascar, Ecuador, La Pampa, etc.): sobre columnas, pilares de piedra o madera porque es necesario proteger el grano y tener una despensa cercana. 

Argolibio

Villarín de Piorno

El hórreo, en Asturias, es una construcción frecuente en nuestro paisaje y que, a estas alturas de la información web y del abandono del medio rural, cuando los jabalíes y otras muchas especies invasoras proliferan en las zonas urbanas y periurbanas entiendo que es necesario un comentario sobre el nacimiento de tales arquitecturas.
El rey Ordoño I dona al obispado varias iglesias y monasterios "...cum domibus, orreis, cubis..." en el año 867.

Para hablar de paisaje analizando esta sola unidad, el hórreo, es necesario tomar distancia y evitar regionalismos o localismos. Me atengo a la definición que de él da el Diccionario de Autoridades - Tomo IV (1734)

HORREO. s. m. Cierto aposento de madera, con su cubierta de tablas o pizarra, el qual se pone sobre unos pilares tambien de madera, y sobre el pilar una gran pizarra, que cae debaxo del assiento del horreo, lo qual se hace para que no puedan subir los ratones. Usan de ellos los Labradores en Galicia, Astúrias y otras partes, para guardar los granos. Viene del Latino Horreum, que significa esto mismo. AMBR. MOR. lib. 8. cap. 23. Y aun a mi no me espantaba en aquella tierra tanto esto, como ver los graneros, que ellos llaman los hórreos, fabricados desta misma obra. YEP. Chron. Año 611. cap. 3. Mandó que se levantassen, y fuessen a las eras, a trillar el pan para meterle en los hórreos y troxes.

Construcciones con otros materiales y los mismos fines hay muchas en todo el norte peninsular y ninguna exenta de interés.

Naviego

El corredor del que muestra esta imagen tiene planta de octógono irregular, y se aprecian con claridad la imposibilidad de acceder los ratones por los pegoyos, las muelas, y la altura de la tenobia (tenovía, tenovia). Cuando son de piedra, los pegoyos, reposan directamente sobre el suelo,  si son de madera se asientan sobre piedra  y ganan alguna altura sobre el nivel del suelo para evitar la humedad.

Hórreos en Asturias se encuentran en los setenta y ocho concejos; y de los doce distritos notariales existentes en Asturias, se estudiaron once de ellos y se encontraron sesenta y cuatro mil protocolos en los que figura esta construcción.
El origen de la palabra hórreo es discutido pero lejos de conclusiones unánimes, parece que lo más divertido es discutir sin conclusiones.
¿Del término latino "horreum"  o de la raíz preindoeuropea "orro"?

Derecho consuetudinario

Se fundamenta su existencia en el servicio que presta a la casa como granero y guarda de otros productos que han de estar preservados de la humedad y fuera del alcance de ratones como evidencia su sistema constructivo.

Naviego

Generalmente, se levanta en la antojana, al lado de la vivienda, sus pegoyos son de madera o  piedra según la facilidad que se tenga para obtener uno u otro material.
También se usó como dormitorio –cuando la escasez de espacio vital lo imponía- en familias numerosas (casi todas entonces).    
En el espacio desarrollado bajo el hórreo se guardaba el carro,

Besullo

Bueres

colocaban y guardaban  la leña, o hacían de gallineros.

El corredor o los trabes de la tenobia  también se han aprovechado para instalar colmenas (en truébanos) o palomares (consideradas ambas especies como animales domésticos, siempre cerca de la casa – para las abejas en lugar especialmente abrigado,  soleado y visible- para facilitar el control y evitar los hurtos),  y en algunas áreas protegidas del interior del mueble se guardaban las manzanas o se ponían  a curar los quesos y los productos de la matanza.


Sta. Marian de Valdeón
Horreo

Desaparecida la actividad económica agropecuaria y sustituida  por las plantaciones especies forestales de rápido crecimiento, o por las de diente y corta intensivos, se ven hoy las parcelas abandonadas o brindadas a las especies invasoras. En sus ruinas pasean y solazan vertebrados de pequeño tamaño y en el barro de sus muros algunas plantas como Chelidonium majus, Fragaria vesca, o Robus sp.Aprovechaban de los castaños tanto el fruto como la madera y el cuidado comenzaba en la poda:
“[…] se ha de tirar a que suban lo posible y a que echen el mayor vuelo que se pueda. Desde el principio, pues, otearás las cañas que salen principales y maestras, como yo llamo, ahora giren derechas al cielo ahora se espurran a los lados, con que no salgan muy torgadas. Y éstas ya vistas, irás podando a medios años, todas las cañicas de los lados hasta que tengan siete palmos de lisso seguido en sus tuericos […]” Arte General de granjerías, Santo Tomás y Pumarada, Fray Toribio de, FMCE y UP. Muséu del Pueblu d'Asturies. San Esteban (Salamanca) 2006.
debían ser podados para hórreos debía crecer sin injertar durante medio siglo antes de ser convertida en tablones, dejar que éstos secaran a la intemperie y sin humedad hasta alcanzar el punto óptimo para que no se deformaran una vez levantado el mueble.
La madera requirió el cultivo de castaños y el resto de materiales debían encontrarse disponibles en las cercanías y asequibles económicamente.
Rústicos son lo materiales y tosco su trabajado, ni  mármol de Carrara ni caoba pero conociendo su duración tuvieron probado éxito ante el paso del tiempo, hongos, insectos, y casi todos los enemigos potenciales.
Pese a tener cubierta vegetal, lo que no se contemplaba en Diccionario de Autoridades, traigo estas tres imágenes por así tenidos y conocidos en el suroccidente asturiano. Los materiales y configuración de sus elementos son exactamente iguales a los arriba mencionados.


Ibias

Marlongo

Padraira, Grandas

No hay tintes de comentarios de arquitectura y pretendo relacionar la presencia de los hórreos con las formas de vida que hicieron necesaria su existencia durante varios siglos; y el cese de la necesidad pondrá fin a su existencia. Tiempo al tiempo.
Entrañable fue la vida campesina junto al hórreo y así se recoge en canciones y refranes:

"Mi niña, si vas al horru,
del tocino parte poco:
doce meses tiene el añu
semanes cuarenta y ocho".


"Regaleite con un queixu
en señal de matrimoniu;
el matrimoniu foi nulu,
vólvase’l mieu queixu al horru"».


Ha de darte el hórreo lo que le des de ahorro (Ha date l'horru lo que-y deas d'aforru),
hórreo bien abastecido y plato vacío sólo lo quiere el mentecato con su pellejo reñido (Horru bien abastecidu y desocupáu'l platu, quierlo solo'l mentecatu col so pelleyu reñidu), dice la sabia receta campesina.
Jamás aparecerá en un lugar no humanizado, es puramente antrópico su origen; la tendencia demográfica, los envasados al vacío, la llegada de las neveras y la conversión en actividades terciarias de lo que fue la antigua jardinería campesina, harán necesaria la creación de un parque temático por parte de una empresa china para pasar una tarde del sábado con los niños, cenar una hamburguesa, y aprender a manejar los palillos. 

Cómo quieres que te quiera
galán, y que te regale,
si del horro en el que duermo,
tien la llave mio padre
El antepasado más antiguo del hórreo (orru) asturiano, ya que éste tal como se conserva es una consecución tecnológica muy avanzada desarrollada probablemente en el siglo XV, es un tipo que pervive en Posada de Valdeón y Los Beyos. El hórreo no sólo es granero sino despensa. Los símbolos de sus maderas son similares a los de las estelas, protectores, y  poco a poco  han sido sustituidos por los cristianos.


Casielles

Casielles

Casielles


“En el hórreo guardo yo
coses de mucho valor:
gallines, ajos, castañes
y huevos, al por mayor”.
“...tien los pilpayos fundíos
al mesmu ras del terrén,
tien los pegollos torcíos
qu´aquello da´scalofríos
porque... ¡non fayen sostén...!”.

Quizá su pervivencia se explique porque es un bien mueble, se puede montar sobre suelo ajeno, era propiedad del campesino y podía venderlo, empeñarlo o dejarlo en herencia.

Patrimonio hórreo beyusco

AUTOR DE TEXTO Y FOTOS MANUEL ANTONIO MIRANDA ÁLVAREZ

Algunas iridáceas


POR MANUEL ANTONIO MIRANDA ÁLVAREZ

Todavía no se ha atribuido savia azul  a los vegetales pero es probable que esté el Iris pseudacorusentre los más nobles. Tiene un pasado literario verdaderamente glorioso.





Iris pseudacorus
Es flor encontradiza con los senderistas en algunas zonas encharcadas, arroyos poco profundos, orillas e islotes de los ríos; prefiere los suelos ligeramente ácidos para asentarse. La mayoría de las flores quedan atrás, desapercibidas, a nuestro paso, pero ésta alcanza una altura considerable –puede rebasar 1.5 m- y ‘queda muy bien en un florero’, si las flores conocieran a los hombres se esconderían bajo tierra a su paso; esta planta es cortada para alfombrar procesiones cristianas con sus hojas, las espadañas.

Clodoveo, unificador de la Galia y primer rey de los francos en los últimos años del s. V  primeros del VI y fundador de la dinastía de los Merovingios, quedó entre el Rin y los godos  -de la sartén al fuego o entre la espada y la pared- pero echó un último vistazo y observó verdes tallos con flores amarillas en sus extremos, coligió que sus raíces llegarían al lecho del río, que no sería profundo y podría cruzar para tener mejor posición. Lo hizo, venció, y  adoptó la flor como emblema.

El rey Luis VII de Francia la agregó a su escudo, y desde entonces ‘floreció’ en los de otras casas nobles y hasta en el monasterio de Santa María la Real de Nieva (por los cruces de Casas, linajes, dinastías, etc.).
Pero su nombre tiene orígenes más altos, divinos.
Irises hija de Taumante y de la oceánida Electra, hermana de las Harpías,  se describe en la Ilíada como mensajera de los dioses, es la encargada de hacer llegar sus mensajes –siempre necesitan mensajeros- a los seres humanos (Hermes lo es en La Odisea). Se encarna  en el arco iris que divulga el pacto de los humanos y los dioses y el fin de la tormenta. Se representa como una virgen con alas doradas que viaja con extrema velocidad.



Iris sp.
Las imágenes anteriores representan otras especies del mismo género, que viven en distintos hábitats, pero no han tenido el mismo marketing.

Las Iridáceas  tienen algún otro género muy, muy, afamado, como el azafrán (Crocus sativus) del que no se aportan imágenes porque no será encontrado paseando por la España húmeda, o sería noticia internacional de primera página.




Crocus sp.
Otras florecillas, Crocus también, sí alfombran los prados y de manera generosa.
Pavor me entra cuando algunos cocineros que lucen estrellas de la Guía Michelín adornan sus platos con flores porque combinan bien los colores en el plato: algunas de la Iridáceas –y de otras familias- son tóxicas en todas o alguna de sus partes: zapatero a tus zapatos, Botánica, restauración, y fotografía exhiben nombres diferentes, por algo será y … con las cosas de comer no se juega ¡eh!
Esta corta familia tiene otras flores, Romulea, abundantes en las praderas de diente.



Pese a no ser familia numerosa volveremos sobre ella, Iridaceae, porque en estas entradas se ha de buscar lo que el campo regala a quien sepa mirar, para el resto están percepciones de otros sentidos.


AUTOR DE TEXTO Y FOTOS MANUEL ANTONIO MIRANDA ÁLVAREZ

Brañavalera


POR MANUEL ANTONIO MIRANDA ÁLVAREZ

Excursión del 5 de febrero de 1994

Mapa de Brañavalera
Para coronar esta agradecida cumbre partimos de Tiós, que dista de Campomanes, capital de la parroquia, algo menos de 2 km. Ya en el pueblo, al final de la carretera,  sale un camino con firme de cemento que lo atraviesa desde la iglesia, pasando por delante del bar, y continúa por una pista recientemente abierta.

Al poco de salir, hacia el S, hay una buena panorámica del valle del Huerna. También de las cumbres de Pajares y el Negrón. Un poco más arriba quedan a derecha e izquierda prados y arbolado de castaño. No hay pérdida posible y la pendiente no es demasiado pronunciada.

Aproximación a Brañavalera

Al cambiar de ladera se ven, partiendo del pico Tres Concejos, hacia el N, las sierras de Carroceda y de Ranero. Por el flanco O de éstas trepa la vía ferroviaria de RENFE y se puede contemplar fortuitamente, como si de un scalextric se tratara, el paso de algún convoy. Ya no se cambia de ladera y la visión se abre hacia el N, siguiendo el curso del río Pajares. A medida que se gana altura aparecen La Magdalena y El Aramo; entre ambos El Naranco y, en su falda, Oviedo; también Campomanes, Pola de Lena y Navidiello.

El camino discurre entre prados con cabañas. Al llegar a una fuente, donde nace un arroyo, empieza el monte bajo a la izquierda, a la derecha alternan monte y prado. Poco más arriba se ve una espesura formada por acebos y espineras. A medida que se avanza, los acebos llegan a flanquear el camino. La pista termina en una collada con campera desde la que se ven:
La Magdalena, la collada de La Cobertoria, El Aramo, y las antenas de El Gamoniteiro, El Naranco y la llanura de la región central.

Aproximación a Brañavalera


La Magdalena o Monsacro

Al SO se ven tres cumbres de casi la misma altura, la del medio es Brañavalera. Se corona avanzando entre matas de acebos y sin gran esfuerzo se conquista el vértice geodésico.

Brañavalera

Cumbre de Brañavalera

Al frente se levanta la piramidal e inconfundible Peña Rueda,

Peña Rueda
a la izquierda (S.SO) de esta montaña se identifica Peña Arpín, la Foz Grande, la Foz Pequeña, el Tapinón, el Fariñentu, Siegalavá, la cima de Peña Ubiña, El Siete y Los Castillines; a la derecha (SO y O) El Panchón, El Ranchón, las cumbres de Ventana y la sierra de La Sobia; y el valle del Huerna, Pajares, el Cellón y el Tres Concejos al S-SE. Una panorámica que resume los caracteres físicos más característicos de la Asturias central.

Sierra del Aramo
Sierra del Aramo

Centro de Asturias desde Brañavalera
Centro de Asturias desde Brañavalera

Al regreso quedaron descolgados Pepe y Antón y se perdieron. El menor decía:

-Estamos perdidos.

El mayor infundía seguridad:

-Éste es el buen camino. Pronto llegaremos.

Tan pesado se puso que el mayor, sintiéndose responsable porque fue él quien se retrasó, empezó a preocuparse. Tenía que aparentar seguridad en la elección que hizo pero apenas era capaz de convencerse a sí mismo.

-No podemos tardar en llegar. Seguro que esto es un atajo.
-¡Al fin! un pueblo.
-¿Será Tiós?
-Si no es, estamos perdidos de veras.

Al acercarnos interrogamos a un hombre que trabajaba la tierra. Se sorprendió por la pregunta y hasta pareció creer que le estábamos tomando el pelo.
Todo se resolvió satisfactoriamente y encontramos a nuestros amigos en el bar que, sin preocupación alguna, tomaban gaseosa con cerveza preparado por Juan Carlos el refresco.
Las más importantes vías de comunicación terrestres -carretera de Pajares, ferrocarril y autopista del Huerna- de Asturias se ven desde aquí, y pasan por el concejo de Lena.

Campomanes, capital de la parroquia del mismo nombre, es el segundo núcleo en importancia del concejo y cuenta con unos mil habitantes. Se fundó esta villa hacia el s. X y fue donada en 1168 a san Salvador de Oviedo por Fernando II; y la de Tiós, hijuela de esta parroquia “... en el territorio del Orna...”se instituyó sobre el s. X también. Se instalaban colonos que se aforaban a un señor y a los que se les determinaba el lugar para poblar y el espacio necesario “... para casas e para ortos...”
De estas villas surgían, posteriormente, los núcleos rurales.

En este concejo de Lena desempeñó un papel de la máxima importancia a lo largo de varios siglos la familia Bernaldo de Quirós, del Marquesado de Camposagrado. En 1752, de los 26 oficios de regidores que tenía el concejo, 12 eran controlados por esta casa.


Valle de Lena

Según algunos, Alfonso II el Casto repobló Campomanes, otorgándoselo en feudo a Johan de la Cruz, por servicios propios y de los montañeses de Orna (Huerna), afamados honderos; y cuentan que en un asalto a Castiello, la vieja “Nardinium” por las tropas del mismo Alfonso, un judío converso que en ellas militaba, lucho con tal coraje aún después de perder ambos ojos en la pelea, que el rey premió al héroe invalido dándole toda la vega próxima, después llamada, “Vega del Ciego”, por ser suya.

[…]Tal es la muerte de Sancho III o el Grande de Navarra, de quien se cuenta que hallo traidora y alevosa muerte en Campomanes por fría venganza de encubierto enemigo, diciéndose que de este sangriento trance tuvo origen el legendario adagio: “Si la ficiste en Payares, pagarasla en Campomanes” (23). No es fácil depurar con critica el suceso por las dichas confusión y vaguedad de los elementos históricos.
[…] en 1.250, es una carta de compensación que hicieron los vecinos de Campomanes (31) con el obispado de Oviedo. […]
Y esto acusa nueva entidad en Lena, de la que fueron fundiendo sucesivamente para formar el concejo grande. Su templo y pertenencias fueron donadas por el citado rey Fernando II en 1.168, al obispo Don Gonzalo y a su Iglesia de Oviedo, comprendiendo no solamente la de Santa María de Campomanes con todas sus heredades y con la de San Antolino  (Sotiello) con sus términos entre los ríos Lena y Orna […].

Los diezmos de la parroquia de Campomanes y su hijuela, Tiós, se los repartían el párroco de Campomanes y el cura abad de Parana:

“... un real de cada potro o potra, lechuza de dos, dos reales y llegando a tres, la quarta parte del valor de un potro o potra y llegando a quatro la tercera parte dicho y si llegase a cinco, medio, y de diez, un potro
o potra y por el mismo caso los terneros y terneras de las bacas, pagándose por los cabritos, corderos y mamones, seis maravedís por cabeza y llegando el caso de tener diez cabezas de cada una de ellas habrá de pagar una...”.

Con el mismo detalle se recogen las aportaciones que se han de hacer para las frutas y productos de huerta.
Muy abundantes y esclarecedores son los documentos en torno a Campomanes y su territorio, al político Campomanes, a los Bernaldo de Quirós, a la toponimia; todo ello se convierte en luz que ilumina el paisaje.

P.D.1.- 20 años después de la excursión aquí narrada los cambios son visibles y palpables. El paisaje agrario es una reliquia de lo que fue, y que los textos históricos incluidos en la entrada sugiere con meridiana claridad. Discurren por este angosto valle los más importantes flujos de personas, comunicaciones y mercancías del territorio asturiano; en este año 2015 resaltan las obras de la autopista y las de la variante de Pajares.


Servicio cartográfico del Principado de Asturias
Envueltas todas en discusiones políticas partidistas pero con alguna incidencia interesante como las que la Naturaleza escupe a la cara de quieres quieren emparedarla.
Las villas y ciudades continúan drenando población –donde quitan y no ponen gran montón descomponen- y las fincas de labor se ven invadidas por las especies colonizadoras y la fauna silvestre que las acompaña. Los jardineros eligieron pasear por parques de hormigón y cuidar de geranios en la terraza.  

P.D.2.- Campomanes y sus alrededores perdieron los puestos de trabajo que giraban alrededor de las explotaciones carboníferas, concentraron a los campesinos en la capital, Pola de Lena y, por canalizar las comunicaciones de todo tipo con la Meseta, este fondo de saco del río Lena es un punto de dinámica economía.

AUTOR DE TEXTO Y FOTOS MANUEL ANTONIO MIRANDA ÁLVAREZ




Cascada Seimeira


POR MANUEL ANTONIO MIRANDA ÁLVAREZ

Está dentro de La Reserva de la Biosfera Oscos-Eo y Terras de Burón.
El nombre es redundante porque en la zona se conocen a las cascadas como seimeiras.
Las cascadas, caídas, cataratas, son sistemas dinámicos, vivos, variables según estaciones, meteorología, y años; el transcurso de los años sólo es apreciable a escala geológica: altura, el ancho del lecho, la forma de las paredes, dependen de las distintas capas que forman la roca sobre la que discurre el agua. El fenómeno se forma, generalmente,  en un río joven, de cauce estrecho, por la desigual resistencia que oponen las rocas a la erosión por el agua.


Este recorrido es una inmersión en las pizarras de Oscos, el sustrato geológico se evidencia en toda piedra a la vista: viviendas, techos, y cierres de fincas por pared.

Mi primera visita a Santa Eulalia se Oscos fue hacia 1975, no había suministro eléctrico por tormenta (supongo que era la causa de la oscuridad) y en el bar que visité –creo que era Casa Pedro- se iluminaban gracias a un motor de explosión convertido en grupo electrógeno; Casa Pedro era un bar-tienda con un amplísimo surtido de todo lo que podía ser necesario,  y tal vez tuviera (no recuerdo con precisión) el piso de suelo visto, roca madre pizarrosa, conjeturo.

Hoy, 40 años después, iniciamos la corta caminata en Pumares, desde al área recreativa, a menos de un km de Santa Eulalia de Oscos.
Siguiendo la orilla del río Agüeira, se pasa por Ancadeira, aldea deshabitada,  con restos de la arquitectura bajo la que vivieron sus pobladores. En Ancadeira se está, aproximadamente, a mitad de camino; se trata de una aldea abandonada en busca de mejores condiciones-¿engañosas?- de vida. A la vista de las ‘comodidades’ de las que hoy disfrutan los habitantes de las villas y ciudades en escenarios de alguna precariedad: no tenían horario ni convenio colectivo, carecían de lavadoras de ropa y de lavavajillas, pero es dudoso en alcanzaran mejor calidad de vida en los pisos-conejera de las urbes a las que irían a parar, como todos, pues todos tenemos origen rural con un recorrido más o menos largo. No resulta fácil encontrar el equilibrio entre unas y otras formas de vida: las actuales no son buenas y las pretéritas parecen idealizadas: incompatibilidad absoluta entre ambas ideas.


El río Agüeiria es fundamentalmente asturiano aunque da sus primeros pasos en tierras lucenses, y desemboca en el Navia. Fue muy rico en pesca antes de la construcción de los embalses de Doiras y Grandas de Salime (los salmones rebasaban Pelorde). Se encuentran en Asturias varios topónimos construidos por Nav-: Nava, Navachos, Naval, Navales, Navaliegas, Navalín, Navalios, Navallo, Navalón, Navar, Navarín, Navarriego, Navarro, Naveces, Naveda, Navelgas, Naveo, Naves, Navexu, Navia, Navidiello, Naviego, Naviella, quizá varios más.

El camino se estrecha y se mantiene siempre rayano al río,  unas veces cercano y otras un poco más alejado. La ruta es sencilla, ondulada, aunque el saldo es siempre ascendente.


Aproximación a Seimeira

Es de gran belleza, recomendable en verano por la galería vegetal que horada, también  en invierno por el aire romántico-fantasmagórico y rico colorido de musgos y líquenes; en toda época resulta grata y un urbanita la recordará como un sueño, creerán haber estado en Brocelandia.

El roquedo está formado por areniscas y pizarras con la vegetación que le es propia a estos suelos. Ofrece una paleta riquísima de verdes de plantas sin flores.


Tras cruzar el núcleo abandonado damos con la senda al otro lado, a orillas del río.
Pronto llegaremos a la base de la cascada.

La comarca de Los Oscos se abrió a Asturias con el paso del puerto de La Garganta.


En las praderías del puerto se celebra anualmente una feria de ganado el 26 de julio que convoca a tratantes de ganado e instala  puestos de venta de productos tradicionales.

La comarca es una penillanura  tajada por la actual red fluvial, las zonas altas son de suave topografía, se dedican a la ganadería, la agricultura, y están separadas por valles muy encajados.
Sobre los encantos de esta comarca es casi ocioso extenderse pues se ha dado a conocer de manera profusamente en los últimos años. La vegetación arbolada se refugia en los estrechos valles y lugares de fuerte pendiente, a mayores alturas reina el monte bajo y las tierras de la meseta. Los árboles se dedicaron a la construcción, aperos, carbón vegetal, mantenimiento de las herrerías; el fruto del castaño fue determinante en la alimentación de los humanos, también de algunos animales domésticos y, por supuesto, silvestres.  



Cascada Seimeira
La más completa vista se alcanza ascendiendo por la derecha del salto.
La quiastolita es un silicato de aluminio que forma inclusiones simétricas de cuatro cristales prismáticos de distribución paralela que forman una cruz característica; se atribuye a un monje del monasterio de Villanueva de Oscos su difusión. En la actualidad es frecuente su presencia en todas las tiendas de artesanía y con infinidad de aplicaciones “mágicas y medicinales”. En esta comarca, en Boal, y en otros lugares del occidente asturiano se encuentran piezas con aspecto pizarroso, estrechamente fusiforme, que al cortarlas transversalmente dejan a la vista la hermosa macla que se ve en esta fotografía.


Dice Madoz –mediados siglo XIX- que el pueblo de Ancadeira cuenta con 8 vecinos y 31 almas; produce centeno,  maíz y patatas; y la industria se centra en la construcción de clavos. Su población no era escasa considerando el número de vecinos: cuatro hab./vivienda.
Es Ancadeira uno más de los pueblos fantasma que quedan en Asturias y lo sustancial del éxodo rural son las amplias áreas que quedan asilvestradas, sin sus jardineros tradicionales, veremos –ya vemos- notables cambios en el paisaje, cambios que se traducen en la flora y en la fauna, cambios que trascienden el lugar de desarrollo y llegan a las ciudades, y a todas las capas sociales.



AUTOR DE TEXTO Y FOTOS MANUEL ANTONIO MIRANDA ÁLVAREZ

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